Urantia Association
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Despedida a Cathy Jones

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Número especial

Cathy Jones se graduó de este mundo el 17 de septiembre de 2016 a la edad de 91 años. Cathy fue amada y respetada por muchos estudiantes de El libro de Urantia de todo el mundo. Ella desempeñó un papel prominente en la construcción de la Asociación Urantia Internacional y trabajó incansablemente para la revelación. Sirvió como primera administradora ejecutiva de la Asociación y fundó este boletín, Tidings, para mantenernos en contacto con las noticias y los acontecimientos de las asociaciones Urantia de todo el globo.

La ceremonia de homenaje se celebró el 10 de octubre. En nombre de la Asociación Urantia y en honor a la dedicación de Cathy a la revelación, Rick Lyon entregó a los nietos de Cathy el Premio Amadón.

award-casey-and-oliverEn palabras de la nieta de Cathy, Casey:

«Mi abuela y yo mantuvimos una relación muy especial. Ante todo, era mi mejor amiga. Me enseñó muchas cosas a lo largo de mi vida, pero lo más importante fue a amar incondicionalmente. Me gustaría que todos supieran que ella creía verdaderamente que todos habíamos sido creados iguales y que nadie podía juzgar a nadie, más bien teníamos que abrazarnos y amarnos los unos a los otros. En la última entrada de su diario, escribió: «naces y mueres y lo que deberías hacer entre las dos cosas es amar».

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Los siguientes testimonios muestran la inspiración que supuso Cathy para muchos estudiantes de El libro de Urantia, comenzando por Patricia Snyder, una amiga íntima que la acompañó durante los momentos difíciles de su enfermedad en los últimos meses y la ayudó a recaudar los fondos necesarios para traerla desde China y poder descansar en paz junto a su familia.

Patricia Snyder
EEUU

Mi corazón canta y llora al comunicarles que Cathy falleció el pasado fin de semana. Casey, su nieta, estaba con ella tomándole la mano. Casey dijo que fue un bonito tránsito. Con el corazón cantando y llorando, digo que no podía haber sido de otra manera con Cathy. Gracias a todos por su apoyo, sus oraciones y sus buenas vibraciones en las intensas pruebas que Cathy pasó para volver a casa. Su verdadero viaje ha comenzado. ¡Un aplauso para los agondonteros!

Gaétan Charland
Quebec (Canadá)

Conocí a Cathy Jones el otoño de 1999 durante una celebración de la asociación local de Quebec (Canadá). Desde entonces, Cathy ha sido parte de mi vida, como amiga y como mentora. Cathy era siempre la primera en ofrecerse voluntaria cuando había que hacer alguna tarea, no importa lo grande, pequeña o importante que fuera. Para mí esa fue la marca distintiva de una verdadera líder y servidora. Como primer presidente de la Asociación Urantia Internacional, Cathy fue mi mentora durante muchos años. Ella sirvió después como administradora ejecutiva y siempre aportó generosamente su tiempo y su experiencia como cofundadora de la Asociación.

Lo  que recuerdo de la personalidad de Cathy es su buen talante, paciencia, generosidad y fiel integridad a la misión de El libro de Urantia y sus enseñanzas. No tengo dudas de que su espíritu de servicio continuará siendo un ejemplo para muchos de nosotros mientras seguimos viajando por la vida.

Espero con ilusión el momento en que nos encontremos y trabajemos juntos de nuevo en el siguiente mundo de nuestra nueva vida.

Chris Wood
Presidente de la Asociación Urantia Internacional

Cathy Jones te ponía a trabajar. En la ordenación de los doce, se nos dice:

El hijo del carpintero nunca enseñó la formación del carácter; enseñó el crecimiento del carácter…» [Documento 140:8.27, página 1583.1]

cathy-jones-xmasCathy nos impulsaba a crecer, nos ponía en la situación en la que podías elegir acción positiva, y defendía nuestros errores como grandes oportunidades de aprender y evolucionar personalmente.

Cuando conocí a Cathy, me puso a trabajar para identificar a los líderes regionales y construir una comunidad local en mi ciudad. La segunda vez que nos vimos, hizo que me sentara durante unas horas para doblar cartas, preparar los sobres y llevarlos a la oficina de correos. 18 años después, hace unos meses, hablé con ella por última vez y había planeado sincronizar las conferencias locales y regionales de Estados Unidos. Siempre estaba marcando el camino.

Estudien El libro de Urantia, ámense los unos a los otros, pónganse a trabajar. Soy una de las muchas personas de todo el mundo a las que Cathy guió hacia el liderazgo. Ella cambió mi vida. Fue un honor servir con Cathy Jones.

Rick Lyon
Indiana (EEUU)

cathy-and-rickCathy fue una de las fuerzas impulsoras de la creación de la Asociación Urantia Internacional. Pasó muchas horas al teléfono y muchos días viajando para ayudar a los estudiantes de El libro de Urantia a crear la mayoría de las asociaciones locales. Tenemos varios archivadores de correspondencia que escribió en sus esfuerzos por crear y dirigir la Asociación. Pasó muchos días fuera de casa viviendo en el 533 de Chicago y trabajando incansablemente por esta revelación y esta organización. Fue una gran instructora y líder de esta revelación y su amor por la gente abarcaba a todo aquel que conocía. No solo creía en estas enseñanzas sino que las vivía. Tuvo una gran fe y esperanza en la Asociación y en todos nosotros.

Carlos Runinsky
Buenos Aires (Argentina)

Puedo decir que Cathy Jones es mi hermana para siempre. La tengo en mi corazón. Desde que la conocí sentí que éramos familia. Desde ese día, hace unos 15 años, hay un lugar en mi corazón que le pertenece. Me mostró su amor y su creencia irrevocable en El libro de Urantia, así como su compromiso para construir una organización de lectores y estudiantes de la Revelación. Vino a Sudamérica sin conocer el idioma ni a los lectores, pero con la misión de ayudar a crear una Asociación Urantia. Ocurrió en la primera conferencia de lectores que tuvo lugar en Santiago de Chile, a donde volé desde Buenos Aires. Y la tarea se logró: nació la Asociación Urantia del Cono Sur. Pero aunque este capítulo de la Asociación no duró mucho tiempo, proporcionó los cimientos para la creación de diferentes asociaciones en esos países, cuyos lectores intentaron trabajar juntos. Ese día, ella designó a los cargos de la primera junta y me convertí en vicepresidente. Me eligió como líder sin ningún motivo, pero al hacerlo sentí que estaba obligado a actuar según sus expectativas, y me he implicado en el movimiento Urantia desde ese día, principalmente por ella. Ella ha inspirado siempre a todos los que han tenido la suerte de conocerla.

He intentado recordar algunas de nuestras conversaciones, y recuerdo haber pedido y recibido sus sabios consejos muchas veces. La impresión más vívida es el sentimiento amoroso que viene a mi mente cuando pienso en Cathy. Ella es una gran alma amorosa que nos muestra el camino para ser un hijo de Dios…

Espero verte de nuevo, querida Cathy (aunque no demasiado pronto :-)) Disfruta de tu nueva residencia. Muchos de nosotros echaremos de menos tu presencia física, el sonido especial de tu voz, pero permaneces en nuestra mente y nuestro corazón. ¡Te quiero, querida hermana! ¡Gracias por todo!

Marian Hughes
Hawaii (EEUU)

Tuve el privilegio de llamar a Cathy amiga, mentora y hermana. Esta mañana sentí que sus ángeles elevaban sus alas para transportar su bella alma al mundo mansión número uno. Cathy trabajó incansablemente con su Rolodex en su oficina de la Fundación para construir la nueva organización de lectores. Ella simplemente nos llamó y reunió al rebaño disperso para formar la Asociación Urantia Internacional. Luego comenzó a viajar por EEUU y por el mundo acreditando a muchas asociaciones diferentes y fomentando que líderes e instructores siguieran adelante con la misión. Qué soldado con mentalidad de servicio era y cuánto la amábamos muchos de nosotros.

Así que alegrémonos de que pronto tendrá su nueva y bella forma morontial y de que algún día nos reuniremos con nuestra querida hermana. Alegrémonos de que, gracias a sus amigos y a su familia, tiene una tumba terrenal cerca de su hogar, que tan importante era para ella. Mantengamos lo que ella comenzó tan valerosamente y continuemos haciendo que la Asociación Urantia Internacional sea la maravillosa organización mundial en la que se ha convertido.

cathy-marian-tonia-patEn memoria de Cathy, seguiré haciendo donaciones tanto a la Asociación Urantia de los Estados Unidos (UAUS) como a la Asociación Urantia Internacional (AUI) y espero que muchos de ustedes se unan a mí, pues es lo que ella verdaderamente querría que hiciéramos mientras pensamos en el trabajo que ha hecho.

David Linthicum
Tulsa (Oklahoma, EEUU)

Conocí a Cathy en la ceremonia de acreditación de Spirit of Oklahoma en 1997. A lo largo de los años, ella fue mi mentora y amiga, siempre dispuesta a ofrecer sabios consejos, apoyo y, por encima de todo, palabras de ánimo que me ayudaron a capear tormentas por el camino. Una vez que me sentía bastante desanimado, me dijo de esa manera que tenía de animar, que fuera paciente, que tuviera en mente una perspectiva más amplia, que hiciera el trabajo, que construyera las bases hoy y que tuviera fe en que los que nos siguen partirían de ahí. Llevé ese mensaje conmigo desde entonces, y me ha sido muy útil. Cathy fue la personificación del servicio amoroso y de la entrega desinteresada a la revelación. Es muy querida y la echaremos mucho de menos.

Caio Mario Caffe Nascimento
Brasil

cathy-2007-seattleCathy nos dejó un legado de éxitos que ciertamente ayudan a fomentar el progreso espiritual de la humanidad. Por mencionar solo dos: la Asociación Urantia Internacional y las Asociaciones Urantia que ella fundó en varios países del mundo. Estaba dotada de una personalidad brillante, un carácter firme, una mente decidida y una sonrisa amistosa y simpática. Carismática, sí, con una tarea dura y bella que cumplir. Y la cumplió. Qué entusiasmados estábamos los estudiantes brasileños de El libro de Urantia en junio de 2003 cuando nos entregó el Acuerdo de Licencia entre la Fundación Urantia la Asociación Urantia de Brasil, junto con el libro del presidente y la bandera con los tres círculos concéntricos azules sobe fondo blanco. La asociación brasileña echó raíces y floreció. Cathy fue una de esas mujeres magníficas que llevan el testigo del progreso espiritual de la humanidad – una servidora fiel, una heroína planetaria. Que Dios bendiga tu alma, y gracias por tu misión cumplida y también por los recuerdos.

Gary Rawlings
Gales (Reino Unido)

Me gustaría presentar mis respetos y mi homenaje a Catherine Jones, que ha partido ya de Urantia y se ha graduado para ir a los mundos mansión. Ella fue mi mentora y bajo su guía tuve la posibilidad de servir durante dos mandatos para sustituirla como presidente de Miembros de 2005 a 2015 para y en nombre de la Asociación de la que ella era miembro fundador de la organización. Con su capacidad visionaria y personalidad excepcional, Catherine brilló de muchas maneras y, como a muchos otros, la echaremos de menos con cariño. Gracias por recorrer todos esos kilómetros extra.

Con Catherine en mente, intentemos recordar que:

Los débiles se conforman con los propósitos, pero los fuertes actúan. La vida sólo es el trabajo de un día — hacedlo bien. El acto es nuestro; las consecuencias pertenecen a Dios. [Documento 48:7.13 11, página 556.13]

Carl Ramm
Alaska (EEUU)

cathy-sue-alaskaSi bien vi a Cathy brevemente en conferencias y había intercambiado algunos correos y llamadas telefónicas con ella, realmente no llegué a conocerla hasta que se quedó durante un tiempo conmigo y con mi esposa, Susan. Por entonces Cathy estaba en Alaska como parte del trabajo de ayudar a conseguir que comenzara el capítulo de un estado. Susan y yo vivíamos en una diminuta y sucia cabaña cerca del final de un callejón en una cuestionable zona de Anchorage. Cathy nunca dio la más mínima muestra de estar molesta por algo así. En un momento de su vida en la que muchas personas no considerarían jamás algo así, Cathy convivió con casi extraños de una manera tan informal y sencilla como si tuviera veintitrés años. Era el alma de la gentileza, una delicia estar con ella.

Benet Rutenberg
EEUU

Cathy ha sido y sigue siendo un ejemplo para mí. Hizo que muchos de nosotros nos implicáramos en el servicio a la revelación. Fue tan amable como llena de gracia. Su sonrisa traía paz y alegría a todos los que tenían la suerte de estar en su compañía. Es reconfortante saber que falleció de manera tan bella como había vivido. Todos la echaremos de menos, pero solo durante un tiempo. Debería traernos calma y esperanza que algún día muchos de nuestros amigos y nuestra familia nos recibirán en las orillas de un mañana no muy lejano.

Alain Cyr
Quebec (Canadá)

Querida Cathy: si has resucitado al tercer día, como creo, ojalá seas consciente de mis pensamientos y de mi aprecio hacia ti incluso antes de que vaya a los mundos morontiales, y esta esperanza me da la emoción y el entusiasmo de verte de nuevo en un tiempo en el que quizá participemos juntos en alguna aventura. Gracias por tu gran trabajo con nosotros en Canadá y por la unión de la comunidad Urantia. Te deseo una continuidad sublime, un retiro rejuvenecido con proyectos en marcha en las esferas morontiales.

Nathen Jansen
Presidente de la Asociación Urantia de Canadá (UAC)

En nombre de la UAC, tenemos muchos pensamientos maravillosos de Cathy Jones:

Fue en los 90 cuando nos vinculamos a Cathy mientras viajaba extensamente por el mundo creando Asociaciones Urantia. A finales de esa década, se formó la primera asociación Urantia canadiense local, la Asociación Urantia de Quebec, a la que siguió en poco tiempo la Asociación Urantia de las Cascadas (Columbia Británica / Alberta). Este acontecimiento tuvo lugar en la costa oeste de Canadá en un retiro en la isla Bowen, donde muchos de los miembros de grupos de estudio de Vancouver y alrededores se reunieron para inscribir a la Asociación Urantia de las Cascadas. Disfrutaron de la reunión y llegaron a conocer la personalidad cariñosa y simpática de Cathy, pues era fácil comunicarse con ella y disfrutamos mucho de su presencia.

cathy-in-alaskaEn 1999, Cathy se había comprometido seriamente a establecer la Asociación Urantia nacional de Canadá, inaugurada más tarde en el Silver Springs Retreat Centre de Ontario, a la que asistió la asociación local Northern Light de Ontario. En este memorable encuentro, y junto con su pasión incansable por la Asociación, pasamos todos un momento encantador cultivando nuestra amistad con Cathy en Silver Springs.

Tenemos también muchos recuerdos valiosos y queridos de las veces que Cathy nos visitó de nuevo en la costa oeste de Canadá y ayudó a la Asociación Urantia local de las Cascadas con su participación conjunta en la Conferencia IC99 de la Fellowship en Vancouver (Columbia Británica). Ella fue un gran motivo de inspiración para los miembros de la asociación Urantia local en esta conferencia. Siempre estaba trabajando para el mayor bien de la cooperación de grupo allí donde la verdad sincera importaba.

Nuestras oraciones están con Cathy mientras continúa su viaje interminable en las muchas moradas de Cristo Miguel.

Enrique Traver
Brasil

No conocí a Cathy Jones, pero por todo lo que he oído sobre ella, estoy convencido de que marcó una gran diferencia al ayudar a nuestros hermanos y hermanas a establecer las asociaciones Urantia de todo el mundo. Según Rogério Silva, el segundo presidente de la Asociación Urantia de Brasil, ella estuvo allí con Gaétan y con otros para crear nuestra asociación de Brasil en 2004. Rogério nos dijo que la recuerda muy bien. Su simpatía y dedicación a los lectores de El libro de Urantia eran contagiosas y desempeñó un papel significativo en ayudarnos a superar lo desconocido. Rogério dijo que su presencia en aquella ocasión marcó mucho la diferencia en su desempeño como director y más tarde como presidente de la asociación de Brasil, mucho más acentuado aquel día por su presencia en comparación a todos los demás. La echaremos de menos, pero ella es ciertamente una amiga más a la que volver a encontrarse en nuestro próximo viaje.

James Woodward
California (EEUU)

Conocí a Cathy Jones a primeros de los 90, cuando visitaba la casa de los Ploetz, un centro de actividades de El libro de Urantia al sur de California. Aquellos recuerdos son vívidos, recuerdos de conocer a nuevos amigos que estaban activos en el servicio a Urantia. Cathy destacaba; era una persona dinámica y muy decidida a expandir el grupo fraternal que ella había ayudado a crear.

Cathy era carismática y de raíces variadas, que incluían su herencia tejana; era independiente y leal a sus valores. También estaba dotada de un valor formidable y toneladas de fe. Más tarde, como colega, descubriría que su ética laboral era firme y fuerte. La mayoría de la gente no sabe que era yogui. Durante muchos años practicó Kundalini yoga, una práctica cumbre de meditación espiritual y respiración. Estas disciplinas y lealtades produjeron en Cathy lo que reconocemos como verdadero liderazgo. Además, siempre estaba ligada a la gracia – esa sonrisa fácil, esa risa cordial y la calidez de un alma saturada de amor.

Cathy y yo comenzamos a trabajar estrechamente en la Fundación Urantia en el año 2000. Pasaba meses en Chicago dirigiendo y organizando desde su pequeña oficina. Trabajamos juntos en muchos proyectos, algunos locales y otros extendidos por todo el mundo. Como uno de los pocos que conocía su verdadera edad, siempre me asombró cuando planeaba enérgicamente otro viaje de trabajo a Sudamérica o a Rusia, o a cualquier parte donde hubiera lectores organizándose para servir. Estaba siempre llena de entusiasmo con la verdad de El libro de Urantia, con el motivo desinteresado de compartir la historia del libro acerca de lo mucho que Dios nos ama y lo que nos guían todos los ministerios espirituales de nuestro universo amistoso.

cathy-dorothy-chicago-2005A primeros de 2005, Cathy me dijo que necesitábamos un boletín informativo e inspirador. Ella creía en la eficacia de la comunicación personal, pero decía que teníamos que expandir nuestros esfuerzos y compartir las «buenas nuevas de las Asociaciones de Urantia». Después de orar y reflexionar, dijo que iba a llamarlo «Tidings» y me pidió ayuda. Junto con un equipo de voluntarios con talento, creamos el primer número de Tidings en junio de ese año. Sigue siendo un honor haber contribuido a la publicación que Cathy legó.

Los mejores líderes siempre son mentores de los que están preparados y dispuestos a servir. Cathy fue la mentora de muchos de nosotros, y fue mucho más: una amiga cariñosa. El día que llamó y dijo que había decidido retirarse fue digno de recordar. Esperaba esa noticia pero no lo que dijo después. Me pidió que considerara cubrir el puesto, que yo era su primera opción para ser el siguiente administrador ejecutivo de la Asociación Urantia. Era típico de Cathy: señalar una tarea importante, ofrecer su confianza plena ¡y dar a entender de manera encantadora que rechazarla no era una opción! Fue efectivo (y muy aleccionador) y me llevó a nuevos niveles de servicio en esta gran organización. Estoy en duda con Cathy Jones de muchas maneras, y me sigue inspirando. Los que comparten este sentimiento deberían aprovechar toda oportunidad de crecer en liderazgo servidor. Honramos a Catherine actuando bajo nuestro deber moral de ciudadanía cósmica.

¡Adiós, Cathy Jones! Hasta que nos volvamos a ver…

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