Encarcelados y valorados

El Padre paradisíaco valora a todos sus hijos. No importa cuál es tu situación en la vida, él perdona nuestros pecados incluso antes de que pensemos en pedir perdón. La misericordia divina está más allá de nuestra comprensión humana y abarca a todos los que buscan esa misericordia. En la figura de Jesús de Nazaret vemos el amor del Padre a través de las enseñanzas del Maestro, incluso a los que no han conseguido vivir según su máximo potencial.

Todos podemos encontrar consuelo en estas enseñanzas cuando echamos la vista atrás en nuestra vida y reflexionamos sobre los mejores y los peores momentos de la vida, y contemplamos el destino en la vida que nos espera. Para los que creen en las enseñanzas de El libro de Urantia, es consolador saber que la justicia divina y la misericordia divina están disponibles para todos los que desean conocer al Padre y vivir de acuerdo a su voluntad.

¿Pero se extiende la misericordia divina a los que están recluidos en las cárceles de nuestro país, después de que un jurado de sus iguales los haya declarado culpables de los crímenes más atroces? ¿Merecen la misericordia divina los que robaron, violaron, atracaron, engañaron o incluso tomaron la vida de otros? La respuesta es un sí rotundo, ¡pero tiene truco!

Este hecho queda afirmado en el ejemplo de la conversación de Jesús con el criminal condenado en Corinto.

Hermano mío, has pasado por malos tiempos. Te has extraviado; te has enredado en las mallas del crimen… Tus semejantes están obligados a juzgarte por lo que has hecho, pero existe un Juez a quien puedes apelar para ser perdonado, y que te juzgará por tus verdaderos móviles y tus mejores intenciones. No debes temer hacer frente al juicio de Dios, si tu arrepentimiento es auténtico y tu fe sincera. El hecho de que tu error lleve consigo la pena de muerte impuesta por los hombres, no afecta a la oportunidad que tiene tu alma de obtener justicia y de gozar de misericordia ante los tribunales celestiales. [Documento 133:4.12, página 1475.5]

Es instructivo reflexionar sobre las enseñanzas de Jesús en Tiro, donde afirmó:

No cometáis el error de apreciar el valor del alma según las imperfecciones de la mente o los apetitos del cuerpo. No juzguéis el alma ni evaluéis su destino sobre la base de un solo episodio humano desafortunado. Vuestro destino espiritual sólo está condicionado por vuestros anhelos e intenciones espirituales. [Documento 156:5.9, página 1739.4]

La Asociación Urantia tiene un equipo entregado de voluntarios cuya misión es proporcionar a los encarcelados una oportunidad de aprender los mensajes salvadores del alma de El libro de Urantia. Este grupo está organizado bajo el paraguas del comité de Diseminación y es conocido como PIRT (siglas en inglés de Equipo de Respuesta a Peticiones de Reclusos). Estos voluntarios se organizaron por primera vez en 2005 y han estado activos respondiendo peticiones de reclusos sobre El libro de Urantia, pues creen firmemente que todas las personas son valoradas, independientemente de los errores pasados o del mal comportamiento.

Desde los inicios del PIRT se han enviado más de 2.000 libros a reclusos de toda América. Nos recuerdan que los ángeles del cielo celebran cuando se encuentra a una oveja perdida, y la misión del PIRT es buscar esas ovejas perdidas y devolverlas al redil.

No mucha gente lo sabe, pero los esfuerzos de sembrar El libro de Urantia en las prisiones de nuestro país comenzaron debido al trabajo de una sola mujer que trabajaba con la Fundación Urantia para colocar unos 300 libros de tapa dura en el sistema penitenciario, allá por el 2000. Desde entonces miles de reclusos han escrito a la Fundación buscando tener un libro para ellos solos.

Como para todos nosotros, el libro suele ser un recurso salvavidas, un compañero constante de esas personas hambrientas de verdad. No hay nada más satisfactorio que leer los numerosos testimonios sinceros y las cartas de agradecimiento por el regalo de la revelación y sus edificantes mensajes de amor y perdón.

Dios nos pide que todos y cada uno de nosotros progresemos en el viaje de nuestra vida. El equipo PIRT está aquí para alentar a los reclusos que nos contactan a que cambien su perspectiva de la vida, que puedan convertirse en mejores ciudadanos, hijos e hijas, esposos y esposas, madres y padres. Creemos que los mensajes salvadores de El libro de Urantia  resonarán en su corazón, lo que a su vez ayudará a reducir la tasa de reincidencia que es epidémica en este país.

Las estadísticas de la Oficina de Justicia de los EEUU indican un índice muy alto de arrestos después de la liberación, lo que da como resultado el regreso a la prisión. El Estudio de Reincidencia de los Prisioneros Estatales rastreó una muestra de expresidiarios de 30 Estados durante un periodo de 9 años tras su liberación (2005-2014).

He aquí algunos de los puntos más destacados del estudio:

  • Los 401.288 prisioneros estatales liberados en 2005 tuvieron 1.994.000 de arrestos durante el periodo de 9 años, con una media de 5 arrestos por prisionero liberado.
  • El 44% de los prisioneros liberados fueron arrestados durante el año siguiente a su liberación.
  • Se estima que un 68% de los prisioneros liberados fueron arrestados en los siguientes 3 años, el 79% en los siguientes 6 años y el 83% en los siguientes 9 años.

Debemos recordar que los autores de El libro de Urantia nos dicen que los mayores inhibidores del crecimiento espiritual son el prejuicio y la ignorancia. Podemos ayudar a los reclusos a reducir estos dos impedimentos ofreciéndoles las verdades superiores que se encuentran en El libro de Urantia como un acto de servicio amoroso a nuestros semejantes. Como están expuestos a las maravillosas enseñanzas de Jesús, es muy posible que la tentación de volver a la vida delictiva disminuya considerablemente, o puede que incluso desaparezca por completo.

Más de 140 instalaciones federales y estatales de Georgia, Alabama y Mississippi fueron consultadas para ver el interés en colocar El libro de Urantia en sus bibliotecas. La respuesta fue muy alentadora: los directores de las bibliotecas respondieron positivamente y pidieron el libro para sus instalaciones. Sembrar las prisiones y cárceles del país ha demostrado ser un modelo exitoso que el PIRT está llevando a cabo de manera activa con un nuevo programa de siembra en bibliotecas de prisiones que enviará unos 170 libros (en inglés y español) a instalaciones seleccionadas de todo el país.

Una humanidad progresiva e infundida de espiritualidad es un importante paso hacia la era de luz y vida en nuestro querido planeta. Tenemos una gran revelación que compartir y es a «los expulsados, los delincuentes olvidados, las ovejas perdidas» a los que el PIRT ofrece un ministerio salvador. Creemos que todas las almas son valoradas, que el esfuerzo suele ser  necesario para ayudar a las personas a realizar su verdadero potencial en la familia de Dios.

Jesús vivió la vida humana ideal. Para los que descubren la manera de vivir de Jesús, él puede servir como modelo a seguir para las luchas de la vida de hoy. Los autores del libro nos dicen que Jesús/Cristo Miguel nos ama a todos por completo porque realmente nos valora a todos y cada uno de nosotros, independientemente de nuestras faltas, errores y fallos. No hay restricción en el amor de Jesús, incluso para los que languidecen en los lugares más oscuros de nuestro país.

Jesús reveló a este mundo una calidad de rectitud superior a la justicia — el simple concepto técnico del bien y del mal. El amor divino no se limita a perdonar las ofensas; las absorbe y las destruye realmente. El perdón del amor trasciende totalmente el perdón de la misericordia. La misericordia pone a un lado la culpabilidad del mal; pero el amor destruye para siempre el pecado y todas las debilidades que resultan de él. Jesús trajo a Urantia una nueva manera de vivir. Nos enseñó que no resistiéramos al mal, sino que encontráramos a través de él, de Jesús, una bondad que destruye eficazmente el mal. El perdón de Jesús no es una remisión; es una salvación de la condenación. La salvación no menosprecia las ofensas; las enmienda. El verdadero amor no transige con el odio ni lo perdona, lo destruye. El amor de Jesús nunca se siente satisfecho con el simple perdón. El amor del Maestro implica la rehabilitación, la supervivencia eterna. Es perfectamente correcto hablar de la salvación como de una redención, si con ello os referís a esta rehabilitación eterna. [Documento 188:5.2, página 2018.1]